Después de montar en el Darkfest durante dos días en 2021, Ike intentó un salto y sufrió una grave caída. Se rompió el fémur y se dislocó el hombro. Inmediatamente comenzó el largo camino de la recuperación. Ahora, se siente fuerte y vuelve a montar como siempre.
"La caída fue muy dura, ya que me perdí mi primer año de las Copas del Mundo, y solo hay dos años en las carreras junior, de modo que el primer año es importante. Conocíamos el riesgo de hacer el Darkfest antes de la temporada, pero definitivamente no iba a saltármelo porque es mi evento favorito. Mentalmente fue extraño, pasar de sentirme tan bien como siempre sobre la bicicleta, a no ser capaz de sentarme o moverme sin ayuda durante una o dos semanas. Por suerte, tenía la motivación de volver a subirme a la bici, así que me dediqué inmediatamente al proceso de rehabilitación. Fue frustrante, ya que las lesiones eran más complicadas de lo que pensábamos, por lo que tardaron más de lo esperado. Fue extraño pasar de entrenar en un gimnasio para ponerme más fuerte a tener que entrenar para volver a caminar. Fueron 6 meses largos y duros, pero una vez que te subes a una bicicleta de nuevo tu cerebro se olvida de los momentos más difíciles. Afortunadamente, tuve un buen equipo a mi alrededor que me puso al día, pero la lucha por recuperar la confianza es un proceso lento y requiere mucha paciencia. Volver a competir en el Darkfest fue sin duda aterrador, pero superar la semana fue un gran impulso para recuperar la confianza y resolvió muchos problemas. Estoy contento de haber vuelto y de estar en cierta medida preparado para la temporada”.
- Ike Klaassen
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